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en las palabras y tan recto en sus juicios, que
sus conclusiones eran aprobadas por todos.
Y precisamente en una de estas comidas dadas en
honor de don Bosco en Mornese, se dijo que en
Ovada había una muchachita que afirmaba habérsele
aparecido la Virgen. El anuncio había hecho mucho
rumor, singularmente por las circunstancias que le
acompañaron. Había entre los convidados unos que
negaban la aparición, otros que la contaban en el
número de las imposturas o alucionaciones. Algunos
sostenían la realidad y citaban la Salette,
Lourdes, etc. Los que se oponían respondían a
estas razones que los franceses eran demasiado
fáciles y entusiastas para creer. Don Bosco
callaba. Tal era el ardor de la discusión que casi
ninguno comía. Finalmente uno, dándose cuenta del
silencio de don Bosco, le interpeló para que
dijera su parecer.
-Sí, sí, respondieron todos; don Bosco es el
único que puede resolver la cuestión.
Don Bosco, primero evitó entrar en la
discusión, mas después dijo:
->>Qué quieren que diga yo? Si los franceses
son demasiado crédulos, los italianos pecan de lo
contrario. íSon demasiado incrédulos!
Todos cerraron el pico. La realidad es que aún
muchos años después, nunca se pudo juzgar si el
hecho fue sobrenatural o dejó de serlo, porque
había la malignidad de quien todo lo quería negar,
a toda costa; y por otra parte había
circunstancias que parecían verdaderamente
maravillosas. Así decía el padre Leoncini de las
Escuelas Pías, que era testigo de lo que sucedió
en Ovada y que se enteró de las palabras de don
Bosco que llamaron poderosamente la atención, por
medio de un hermano suyo que se encontraba en
Mornese.
El último acto de don Bosco en el pueblo fue el
de bendecir, asistido ((**It8.1016**)) por el
clero, la capilla del colegio dedicada a la
Santísima Virgen de los Dolores, cuya imagen
presidía el altar mayor desde un bellísimo cuadro,
y celebrar allí la santa misa.
En una lápida, colocada bajo los pórticos,
junto a la puerta de la capilla, se lee:
El 13 de diciembre de 1867 -solemnemente -se
dedicó esta iglesita -y -el sacerdote Juan Bosco
-modelo de caridad y de celo -fue el primero en
ofrecer en ella -la Hostia Inmaculada -invocando
sobre el colegio naciente -y sobre el pueblo de
Mornese -las bendiciones de Dios.
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