((**Es7.53**)
que a barrer; a enseñar el catecismo o rezar en la
iglesia, que a asistir en los recreos; a estudiar
tranquilo en su celda, que a acompañar a los
jóvenes de paseo; lo mismo a mandar que a
obedecer. ((**It7.48**))
Trabajando con tales disposiciones de ánimo,
tendremos la bendición de Dios, porque seremos
verdaderos y fieles discípulos y siervos suyos.
Pide acaso el Señor, decía Samuel a Saúl,
holocaustos y víctimas o más bien que se obedezca
su voz? Melior est enim obedientia quam victimae;
et auscultare magis quam offerre adipem arietum
(Mejor es obedecer que sacrificar, mejor la
docilidad que la grasa de los carneros). Debemos
por tanto escuchar y seguir con generosidad la voz
del Superior que representa a Dios y la voz del
deber. Siguiéndola, lograremos el objetivo de
nuestra vocación, ganaremos muchos méritos y
salvaremos nuestras almas y las de los demás>>.
Con frecuencia volvía él a hablar del tema de
la obediencia, llamando la atención sobre el gran
premio que aguarda a los religiosos obedientes,
aun en esta tierra; esto es, la suerte de poder
salvar almas.
Y sigue la crónica de Bonetti:
<>-Afortunado el clérigo que ha saboreado cuán
dulce es trabajar por la salvación de las almas.
Ya no teme al frío, ni al calor; al hambre, a la
sed; a los disgustos o a las afrentas, ni siquiera
a la muerte. Todo lo sacrifica con tal de ganar
almas para Dios. Qui facit veritatem venit ad
lucem. El que obra el bien llega muy pronto a
contemplar la luz. Probadlo y lo veréis>>.
Mientras don Bosco trataba de verter su
espíritu en el alma de los clérigos, cierto número
de los cuales no pertenecía a la Pía Sociedad,
llegó al Oratorio y permaneció en él unos días,
don Serafín Allievi, hombre docto, impregnado de
celo sacerdotal, verdadero apóstol de la juventud,
que realizaba en Milán un inmenso bien, dirigiendo
el Oratorio de San Luis. Don Bosco, ((**It7.49**)) que
había sido su huésped el año 1850, lo recibió con
todos los honores y una noche le invitó a hablar a
todos los jóvenes, después de las oraciones.
Allievi tenía el proyecto de fundar un
internado para muchachos
1 Jn. III, 21.(**Es7.53**))
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