((**Es7.20**)
-íOh si supieras el magnífico premio preparado
a la reina de las virtudes! íAnimo!
A los aguinaldos precedentes podemos añadir
otros cuatro que nos fueron entregados hace poco
tiempo.
Anglois.-Redobla el esfuerzo; recurre con
frecuencia a mí y camina hacia adelante.
Garino.-Acuérdate de mí, que soy tu madre.
B.-No pretendas hacerte santo de un golpe.
S.-Es necesario dar cada día un paso hacia el
paraíso.
Varios días duró el desfile de jóvenes por la
habitación de don Bosco, para recibir el propio
aguinaldo. Pero, antes de que todos lo supieran,
disminuyó el entusiasmo y la curiosidad de
recibirlo y conocerlo. Al ver el efecto producido
en los compañeros, persuadidos de que no era
ninguna broma, temerosos por los reproches de la
propia conciencia, pusilánimes para ponerse al
servicio de Dios, hacia el final, hubo cierto
número que no quería ir a retirar el propio
papelito, por miedo a leer alguna verdad demasiado
cruda. Algunos de ellos, invitados por don Bosco,
después de alguna vacilación, se decidieron y
fueron a recibir el aguinaldo. Pero trece no se
presentaron.
((**It7.9**)) Todavía
está el billetito de éstos en aquel cuaderno
famoso, junto al propio nombre. Los referimos aquí
omitiendo los nombres.
-Podrías hacer bastante más por el bien de tu
alma.
-La negligencia, unida a la poca piedad, me
disgusta: despiértate.
-Acude a mí con más frecuencia; lucha; yo te
ayudaré a vencer.
-Tienes un gusano que te roe el alma y el
cuerpo; íay, si no lo destruyes!
-Elige mejores compañeros; huye de la pereza;
reza mejor.
-Con un futuro mejor trata de reparar el
pasado: a qué esperas?
-Te agrada el ocio, quieres complacer la gula,
pero me disgustas a mí y a mi Hijo Jesucristo.
íAy, si no te corriges!
-Frecuenta los santos sacramentos; reza mejor;
sé más obediente.
-Arregla bien las cuentas de tu conciencia:
ocupa mejor el tiempo; reza mejor.
-El ocio y la gula hacen temer por ti;
enmiéndate, reza mejor.
-Piensas mucho en el cuerpo, poco en el alma;
la muerte se aproxima, prepárate.
-Medita más las verdades eternas; persevera en
la piedad; por qué recurres tan poco a mí?(**Es7.20**))
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