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Dios contestó que tal vez no pasarían dos
solemnidades que comenzasen por la letra P sin que
aquel vaticinio se cumpliese.
>>-Podría suceder, dijo, que no pasase ni
siquiera una y que muriese dentro de dos o tres
semanas.
>>Este relato hizo estremecer a todos, pues
cada uno temía ser el jovencito indicado en el
sueño.
>>Como en otras ocasiones, la narración de don
Bosco causó un gran bien y como cada uno pensaba
en sus asuntos, desde el día siguiente las
confesiones comenzaron a ser más numerosas que de
costumbre.
>>Muchos jóvenes durante varios días asediaron
a don Bosco preguntándole por cuenta propia, si
eran ellos los que debían morir en breve.
>>Insistentes fueron las preguntas, pero el
buen padre cambiaba de conversación y nada decía
sobre el particular.
>>Dos ideas quedaron fijas en la mente de
todos, a saber: que la muerte sería repentina; que
la predicción se verificaría antes de que se
celebrasen dos solemnidades que comenzasen por P,
esto es: Pascua y Pentecostés. La primera caía
aquel año el 20 de abril.
>>La expectación en el Oratorio era enorme,
cuando el miércoles, 16 de abril, continúa la
crónica de Bonetti, moría en su casa el muchacho
Luis Fornasio, natural de Borgaro Torinese, de
doce años de edad.
>>Hay algunas cosas que notar a este respecto.
>>Cuando don Bosco dijo que uno había de morir,
este muchacho, que ya en principio no era malo,
comenzó a vivir como un verdadero modelo.
>>En los primeros días pidióle a don Bosco que
le permitiese hacer su confesión general. El
siervo de Dios no quería acceder porque la había
hecho ya una vez, pero como el muchacho
insistiese, el buen padre determinó complacerlo.
>>La hizo en dos o tres veces. El mismo día en
que ((**It7.126**)) pidió
este favor o en el que comenzó su confesión empezó
a sentirse mal.
>>Permaneció unos días en el Oratorio siempre
indispuesto. Habiendo llegado dos de sus hermanos
a visitarlo, y enterados de su malestar, pidieron
a don Bosco que dejase a Luis ir a casa por algún
tiempo.
>>Don Bosco concedió el permiso.
>>Aquel mismo día o el anterior, Fornasio había
terminado de hacer su confesión general y recibido
la sagrada comunión.
>>Fue a su casa, estuvo unos días levantado,
pero después guardó cama.
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