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((**Es6.328**) Don Bosco reservaba sus charlas más amenas para estas sesiones al aire libre. Contaba a su manera el diálogo entre un tintero y un candil, escrito por el conde Gaspar Gozzi 1. Inventaba él otro, entre la pluma y el tintero; entre un zapatero y una bota rota que no quería ser remendada en domingo, sino en lunes; entre él mismo y su lamparilla que no ((**It6.430**)) quería alumbrar y era partidaria de los protestantes. Recitaba a veces algunos sonetos jocosos y, entre ellos uno que él había compuesto siendo semiriarista sobre la hoja de su navajilla y que siempre retuvo en la memoria, como nos cuenta el Padre Garino, que lo oyó de sus propios labios en Valsálice. Otras veces narraba fábulas maravillosas, que llenaban la fantasía de los oyentes. Describía al gigante Gargantúa con sus asombrosas aventuras, sucedidas en el campo del imposible y, después, su muerte y su entierro, al que acudieron miles de personas, las cuales no pudieron cubrirlo de tierra, a pesar de haber excavado una fosa profundísima de un kilómetro de larga. -Y quedó al descubierto su nariz, que todavía puede verse, exclamaba: -Aún se ve? -gritaban todos. -Miradla: íes el monte Blanco! 2. La vida que prestaba a sus descripciones y los constantes diálogos animaban las diversas escenas de sus fábulas, amenizadas también con las curiosas preguntas de los chicos que tomaban parte en ellas. El reverendo Piano y otros antiguos alumnos más, todavía las cuentan a los cincuenta años de habérselas oído a don Bosco, alegrando lo indecible a los amigos. Pero no siempre eran fábulas las narraciones de aquellas horas. Al contrario, para entusiasmar a los muchachos con el apostolado evangélico, solía hablarles de las misiones católicas en países de infieles, en Asia, Africa y América. Las tenía constantemente presentes en su pensamiento y las tomaba muy a pechos: describía muchas veces los trabajos y sufrimientos de los misioneros, sus gloriosas empresas, los pueblos convertidos y los martirios sufridos por amor a Jesucristo. Pero en los recreos prefería exponer hechos curiosos y divertidos, 1 Gaspar Gozzi (1713-86) fue un fecundo escritor italiano, nacido en Venecia y fallecido en Padua. Fundó varias publicaciones y escribió El mundo moral su obra maestra, alegórica, en tres volúmenes. (N. del T.). 2 Monte Blanco: el pico culminante de las montañas de los Alpes que limitan el norte de Italia y que, a simple vista, se contemplan desde Turín. (N. del T.). (**Es6.328**))
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