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es dueño absoluto de todo Nuestro Señor
Jesucristo? Id, pues, y pedid, y se os concederá.
Llamad a la puerta y se os abrirá. Jesús desea
dispensaros sus gracias, y en primer lugar las que
se refieren al alma.
Vio una santa sobre el altar al Niño Jesús que,
arremangándose el vestido, sostenía una enorme
cantidad de perlas preciosísimas. Estaba triste.
-Por qué estás tan triste, Señor mío?, preguntó
la santa.
-Porque nadie viene a pedirme las gracias que
tengo preparadas; nadie las quiere. íNo sé a quién
dárselas!
2 de diciembre
La florecilla que hoy propongo es muy
importante: Procuraré tener mucha confianza con
los Superiores. Nosotros no queremos ser temidos,
deseamos ser amados y que tengáis plena confianza
((**It6.321**)) en
nosotros. Hay algo más hermoso en una casa que el
que los superiores gocen de la confianza de los
inferiores? Este es el único medio para lograr que
el Oratorio sea un paraíso terrenal, es el único
medio para que no haya en casa ningún descontento.
Don Bosco está aquí sólo para vuestro bien
temporal y espiritual. Cuando el superior desea
algo de vosotros, os lo dice enseguida; por tanto,
cuando vosotros deseáis algo de él, no lo
encerréis en vuestro corazón; manifestadlo. Si lo
hacéis así, todo marchará bien y estaréis
satisfechos. Ve uno que un alimento le hace daño?
No tiene suficiente abrigo en la cama? Necesita
ropa para defenderse del frío durante el día?
Dígamelo a mí y yo procuraré complacerle en todas
sus peticiones razonables, en la medida que me lo
permita la pobreza de nuestra casa. Que otro no se
encuentra bien de salud? Que tiene alguna
dificultad en la escuela? Que hubo un quid pro quo
con el profesor o con el asistente? Parécele que
alguien le ha agraviado? Aquí estoy yo para
remediarlo todo, y estad seguros además de que
guardaré vuestros secretos sólo para mí y para
vuestro provecho. Mas, por favor, no haya nunca
entre vosotros muchachos que se quejen de algo. En
vez de quejaros y criticar, venid a hablar
conmigo. Nosotros deseamos contentaros y de este
modo se podrá evitar una cantidad infinita de
inconvenientes.
Quede esto dicho no sólo para las cosas
materiales, sino también, y mucho más, para las
cosas espirituales. A veces el demonio os agobia
con una gran melancolía con el recuerdo de la
familia, la sospecha de no gozar de la simpatía de
los superiores, el miedo a que se descubra una
falta y sea castigada, el agobio de no gozar del
aprecio de los compañeros, el desaliento por no
poder adelantar en los estudios. Pues bien,
queréis sacudiros el peso de esta melancolía?
Venid a verme y ya encontraremos la manera de
echarla y poner remedio.
Pero lo que os recomiendo, sobre todo, es que
cuando el demonio venga a tentaros, no os
desaniméis. Queréis aseguraros la victoria? El
mejor medio es manifestar en seguida la tentación
a vuestro director espiritual. El demonio es amigo
de las tinieblas y trabaja siempre en la
oscuridad. Si se le descubre, está vencido.
Un muchacho era muy tentado, hacía todo lo
posible para resistir, pero había llegado a un
punto tal que le parecía ((**It6.322**))
imposible continuar aquella lucha. Se encontró por
casualidad con su superior, el cual, por su rostro
turbado, adivinó la causa de su angustia. Llamóle
aparte y le dijo:
-Por qué estás tan triste? Seguramente que el
demonio te hace la guerra.
Miró el muchacho estupefacto al superior, abrió
su corazón y dijo:
-íSí!
Decir sí y cesar toda molestia fue lo mismo.
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