((**Es5.344**)
b) Nos acercaremos a la mesa eucarística todos
los domingos, fiestas de guardar, novenas y
solemnidades de María y de los Santos protectores
del Oratorio.
c) Durante la semana procuraremos comulgar
todos los viernes, a no ser que nos lo impida
alguna grave ocupación.
((**It5.481**)) 9.
Todos los días, especialmente al rezar el santo
rosario, encomendaremos a María nuestra
asociación, pidiéndole que nos conceda la gracia
de la perseverancia.
10. Procuraremos ofrecer todos los sábados alguna
práctica especial o alguna solemnidad en honor de
la Inmaculada Concepción de María.
11. Tendremos, por tanto, un recogimiento cada vez
más edificante en la oración, en la lectura
espiritual, en el rezo de los oficios divinos, en
el estudio y en la clase.
12. Acogeremos con avidez la palabra de Dios y
repensaremos las verdades oídas.
13. Evitaremos toda pérdida de tiempo para librar
nuestras almas de las tentaciones que suelen
acometer fuertemente en tiempo de ocio; y, por lo
tanto:
14. Después de haber cumplido nuestras propias
obligaciones, emplearemos el tiempo que nos quede
en ocupaciones útiles, como lecturas piadosas e
instructivas, o en la oración.
15. Está mandado el recreo o al menos recomendado
después de la comida, la clase y el estudio.
16. Procuraremos manifestar a nuestros superiores
lo que pueda ser provechoso para nuestro adelanto
moral.
17. Procuraremos también hacer uso con gran
moderación de los permisos que nos suele conceder
la bondad de nuestros superiores, puesto que uno
de nuestros principales fines es la exacta
observancia del reglamento, quebrantado muy a
menudo por el abuso de estos mismos permisos.
18. Tomaremos el alimento que nuestros superiores
dispongan, sin quejarnos jamás de lo que nos
pongan en la mesa, y procuraremos que tampoco se
quejen los demás.
19. El que muestre ilusión por formar parte en
esta asociación deberá, ante todo, purificar su
conciencia en el sacramento de la confesión,
recibir la sagrada comunión, dar luego prueba de
buena conducta durante una semana, leer
atentamente estas reglas y prometer a Dios y a
María Santísima Inmaculada su exacta observancia.
20. El día de su admisión, todos los socios se
acercarán a la santa comunión pidiendo a su Divina
Majestad que obtenga ((**It5.482**)) a
nuestro compañero la virtud de la perseverancia,
de la obediencia y el amor de Dios.
21. La asociación está puesta bajo el patrocinio
de la Inmaculada Concepción, de quien tomamos
nombre y cuya medalla constantemente llevaremos.
Una sincera, filial e ilimitada confianza en
María, un amor singularísimo y una devoción
constante hacia ella nos harán superar todos los
obstáculos y ser firmes en nuestras resoluciones,
rigurosos con nosotros mismos, amables con el
prójimo y exactos en todo.
Aconsejamos además a los hermanos que escriban
los santos nombres de Jesús y de María, primero en
su corazón y en su mente, y luego en sus libros y
en los objetos de su uso.
Rogaremos a nuestro Director que examine el
reglamento y nos manifieste su parecer,
asegurándole que nos atendremos todos a lo que él
disponga. Puede modificarlo en todo lo que le
parezca conveniente.
María Inmaculada, nuestra titular, bendiga
nuestros esfuerzos, puesto que Ella
(**Es5.344**))
<Anterior: 5. 343><Siguiente: 5. 345>