((**Es3.19**)
de los fieles, pero generalmente se adaptaban muy
poco a las necesidades de los tiempos y de
juventud. Para llenar este vacío se entregó a
ello con empeño y compuso IL GIOVANE PROVVEDUTO,
en la práctica de sus deberes, de los ejercicios
de piedad cristiana, y de las principales Vísperas
del año, con un apéndice de cánticos sagrados 1.
Presentó su manuscrito a la tipografía
Marietti, donde le hicieron un avance de
presupuesto, según el cual cada ejemplar
encuadernado y dorado le iba a costar 4,50 liras.
La imprenta Paravía, para colaborar en aquella
buena obra, se conformaba con 25 céntimos por
ejemplar, a base de entregar solamente los pliegos
impresos en rama para que luego Don Bosco los
hiciera encuadernar a su gusto. Don Bosco aceptó
la proposición de Paravía y, como no contaba con
dinero para los gastos de imprensión, comenzó a
valerse de uno de aquellos recursos, que después,
multiplicados por su ingenio práctico, dieron tan
felices resultados. Lo mismo que tal vez habría
hecho cuando publicó la Historia Eclesiástica, la
Historia Sagrada y el Sistema Métrico, lanzó una
circular anunciando su nuevo libro. Cuando se
aseguró de que, según convenio con Speirani,
serían vendidos diez mil ejemplares, empezó la
impresión. Era un libro en formato de 16° con 352
páginas. Se hizo el envío a cuantos habían
suscrito la circular e inmediatamente ((**It3.9**)) hubo que
imprimir cinco mil ejemplares más para satisfacer
las peticiones que continuamente llegaban. Avisó
entonces don Bosco a Paravía que no deshiciese la
composición de tipos, y éste le respondió:
-Ya entendí yo que este libro tendría una venta
extraordinaria.
En efecto, aquel mismo año hubo que imprimir
cinco mil ejemplares más. Marietti se ocupó de
encuadernar elegantemente los ejemplares
destinados a regalo para los bienhechores o a la
venta para personas acomodadas.
Con el andar del tiempo fueron creciendo las
peticiones y la necesidad de proveer a los
Oratorios festivos y a los colegios. En vida de
don Bosco se hicieron hasta ciento veintidós
ediciones, con unos cincuenta mil ejemplares cada
una, como atestigua don Miguel Rúa. Añadiéronse
luego las traducciones hechas al español, al
francés y a otras lenguas, con lo que se pasó con
mucho la
1 Este devocionario fue traducido al castellano
y publicado por la Librería Salesiana de
Barcelona, con el título de EL JOVEN INSTRUIDO.
Posteriormente se ha publicado con el título de EL
JOVEN CRISTIANO y con algunas variaciones sobre el
texto original. (N. del T.)(**Es3.19**))
<Anterior: 3. 18><Siguiente: 3. 20>