Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es2.402**) un todo con él, con las mismas dimensiones de longitud y anchura, y precisamente donde ahora está el refectorio de la comunidad salesiana, se alzaba el cobertizo capilla. Pero la altura del cielo raso quedaba partida en dos, a causa de la pendiente del tejado, mucho más en declive al norte que al mediodía, tal que no quedaba encima espacio suficiente para algo que sirviera de habitación. Cuando los muchachos hacían gimnasia se subían al tejado fácilmente y saltaban desde allí al patio, sin peligro de hacerse daño. Y en el interior, lo mayorcetes podían tocar el techo con la mano subidos sobre un banco. La puerta, de un metro de ancha, tenía dos hojas y una cruz de madera encima; estaba orientada hacia poniente y, al entrar, había que bajar un escaloncito y un pequeño plano inclinado. A la derecha, próximo a la puerta, había un nicho, con una estatuita de San Luis Gonzaga. La misma que don Bosco hacía llevar en procesión a los muchachos por los poco frecuentados caminos de los alrededores. El inculcaba siempre la devoción a María Santísima y a San Luis, como salvaguardia de la bella virtud. Detrás del único altar, adornado con la imagen de la Santísima Madre de Jesús, había una habitación de cierta amplitud, que sirvió al principio de sacristía. Al crecer el número de muchachos ((**It2.538**)) don Bosco derribó la pared divisoria y la sustituyó por dos columnas de madera, que sostenían una viga sobre la cual descansaban las correas del cielo raso; se retiró más atrás el altar y quedó un espacio para coro. Los trabajos de carpintería los ejecutó el joven Coriasso. Para tener una nueva sacristía, se alquiló otro cuarto de la planta baja, a la parte del mediodía y se abrió una portezuela que daba al lado de la epístola. íEs una lástima que haya sido destruida esa iglesia! La posterioridad hubiera podido admirar el monumento donde comenzaron los colosales posteriores establecimientos de don Bosco. Detrás del coro, en el lugar donde hoy existe un pasillo que va desde el patio interior al jardín, se levantaba otro edificio adjunto que tenía la misma anchura del lado de la casa, esto es, doce metros: el techo era más bajo que el de la casa, contra la que se apoyaba, y tenía la vertiente principal hacia levante. Estaba dividido en dos compartimientos iguales, uno hacia el sur con puerta y ventana, que había servido de cuadra y ahora estaba destinado a habitacón; y otro al norte, que se empleaba para leñera y almacén, y que se cambió en trascoro; la buhardilla servía para almacén del heno. La finca que encerraba todas estas pobres construcciones medía 3.697 metros cuadrados; casi toda ella era prado con muchos árboles, y tenía la figura de un polígono irregular de cinco lados. El señor (**Es2.402**))
<Anterior: 2. 401><Siguiente: 2. 403>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com