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firmado por él y por don Bosco, con fecha del
catorce. Fue el último documento de este género
firmado por nuestro Santo 1.
En seguida el alto Prelado prosiguió su viaje
hacia París, en donde sin demora presentó al señor
Flores, ministro plenipotenciario del Ecuador en
Francia, el texto del convenio firmado para que lo
examinara, lo aprobase y, en nombre del Gobierno,
lo enviara a Quito para su publicación oficial. El
ministro no puso ningún reparo, lo refrendó con su
firma y lo envió. El siete de marzo escribió don
Bosco al Presidente de la República, quien le
respondió muy amablemente 2.
Sólo faltaba que don Bosco se pusiese en
relación con el mencionado ministro
plenipotenciario en París, encargado de
suministrar el importe de los pasajes 3. Un
contratiempo obligó a retardar la partida más allá
de lo convenido, que era el ((**It18.429**)) diez
de septiembre: cuando se fue a solicitar los
pasajes, ya no había plazas disponibles en el
barco francés que debía zarpar aquel día para el
Ecuador.
La primera noticia de la nueva empresa de don
Bosco apareció en Unit… Cattolica del doce de
agosto. El Capítulo Superior determinó el personal
destinado para allí en la sesión vespertina del
día dieciocho. Deberían formar la expedición ocho
Salesianos, bajo la dirección del intrépido don
Luis Calcagno 4, que había vuelto del Uruguay, a
donde había ido con la expedición de 1878, siendo
todavía clérigo.
Los preparativos para esta nueva leva imponían
nuevos sacrificios. En el viaje no había que
pensar, pero el resto suponía mucho dinero. La
urgencia de encontrarlo hizo que se sintiera
todavía más la multiplicidad de necesidades que
apremiaban por todas partes, especialmente en
Roma, para la conclusión de la iglesia del Sagrado
Corazón, y en América, para la misión de la Tierra
del Fuego. Preocupado ante los crecientes apuros
financieros, don Miguel Rúa, el diez de octubre,
propuso al Capítulo la oportunidad de aprovechar
la ocasión de la fundación en Quito para pedir
ayuda. Don Bosco dispuso que don Juan Bonetti y
don Juan Bautista Lemoyne preparasen dos
circulares, una más general que abrazase todas las
Misiones, y otra más breve que limitase la llamada
a Patagonia y Tierra del Fuego. En ambas
circulares se consideraba prudente no hacer
alusión a la iglesia del Sagrado Corazón. La
primera está fechada el cuatro de noviembre y la
1 Ap., Doc. núm. 80.
2 Ap., Doc. núm. 81.
3 Cartas del Arzobispo a don Bosco, Roma,
veinte y veintiséis de enero, y París, dieciséis
diecisiete y veinticinco de febrero de 1887.
4 Iban con el Director tres sacerdotes: don
Antonio Fusarini, don Ciriaco Santinelli y el
reverendo Mattana, dos clérigos y otros dos
coadjutores.
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