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diga detalladamente lo que se refiere a los niños,
a las niñas, a las Hermanas y a los Salesianos.
Si por acaso os faltan módulos para extender
estas relaciones, dímelo y te los enviaremos. Hay
mucha tendencia a acudir en nuestra ayuda, pero
conviene que yo sepa lo que escribís, por lo menos
en términos generales; repito, lo que escribís
desde ahí, porque puede ser que me pregunten
acerca de ello en cualquier momento.
En cuanto a los Obispos Auxiliares, necesito
tener alguna petición positiva 1 y, en este
momento, espero lograr algo. La gestión de una
Púrpura para el Arzobispo era algo muy bien
encaminado por el cardenal Nina; pero ahora, por
desgracia, ha pasado a la eternidad. He buscado ya
otro camino, y a su tiempo te diré algo.
Preparo una carta para don Santiago Costamagna
y para tu norma, yo tocaré en particular el
espíritu salesiano, que queremos introducir en
nuestras casas de América.
Caridad, paciencia, dulzura, nunca reproches
humillantes, nunca castigos, hacer bien a todos
los que se pueda y mal a ninguno. Esto valga para
con los Salesianos entre sí, con los alumnos y con
los demás de casa o de fuera. Para las relaciones
con nuestras Hermanas, ten mucha paciencia, pero
rigor en la observancia de sus reglas.
En cuanto a nuestros apuros económicos en
general, haremos toda suerte de sacrificios para
acudir en vuestra ayuda; pero recomienda a todos
que eviten la construcción o ((**It17.627**)) la
compra de inmuebles, que no sean estrictamente
necesarios para nuestro uso. No comprar nunca nada
para revender: campos, terrenos o casas para
lucrarse con ellos.
Procurad que nos ayudemos en este sentido.
Haced cuanto podáis para tener vocaciones, lo
mismo para las Hermanas que para los Salesianos;
pero no os comprometáis, asumiendo demasiados
trabajos. Quien mucho abarca poco aprieta y lo
estropea todo.
Cuando tengas ocasión de hablar con el
Arzobispo, con monseñor Espinosa o con otros
personajes similares, diles que estoy totalmente a
su servicio, especialmente con respecto a cosas de
Roma.
Di a mi sobrina Rosina 2 que cuide mucho de su
salud, que se libre de ir sola al Paraíso. Que
vaya, sí; pero acompañada de muchas almas salvadas
por ella. Que Dios bendiga a todos nuestros hijos
Salesianos y a nuestras hermanas Hijas de María
Auxiliadora.
Que conceda a todos salud, santidad y
perseverancia en el camino del cielo. Mañana y
tarde rezaremos por todos vosotros ante el altar
de María y reza tú también por este pobre
semiciego, que siempre será para ti en J. C.
Turín, 3 5 de agosto de 1885
Afmo. amigo,
JUAN BOSCO, Pbro.
P.D. Una multitud de amigos pide que te diga
sus nombres y te ofrece sus saludos.
1 Se trataba de hacer que fuesen creados como
Obispos Auxiliares para las necesidades de la
vastísima archidiócesis algunos buenos sacerdotes,
amigos de los Salesianos.
2 Era de las Hijas de María Auxiliadora.
3 En realidad don Bosco no estaba entonces en
Mathi, sino en Turín. Pero la clave debe estar en
una cartita del día cinco de agosto a don Joaquín
Berto, a quien decía: <>. Quizás no quería dar
a conocer que estaba fuera, para no dar motivo a
preocupaciones por su salud.
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