((**Es15.175**)
finales de febrero de este año 1880, he ofrecido
al muy reverendo don Bosco una casa de mi
propiedad, contigua a la iglesia parroquial del
Corazón de Jesús de esta ciudad, valorada en
cuarenta mil liras, a condición de que los
Salesianos abrieran allí dos clases gratuitas
elementales para muchachos: este ofrecimiento
quedó sin respuesta>>.
Ya hemos visto en otro lugar por qué quedó sin
respuesta este ofrecimiento 1.
Las diez mil liras para Valsálice no eran
ciertamente una bagatela, pero los que debían
estar agradecidos a tanta largueza eran los
antiguos administradores, cuyas deudas extinguían,
pero no los Salesianos que no tocaron ni un
céntimo. Además, los Salesianos obtuvieron el
usufructo, no la propiedad; en efecto, pagaron a
los Hermanos de las Escuelas Cristianas, durante
ocho años y en concepto de alquiler, ocho mil
liras anuales; y, cuando se hizo la compra, el
Arzobispo no contribuyó en lo más mínimo.
((**It15.191**))
Después de esta introducción, siguen los cargos ya
conocidos contra don Juan Bonetti: violación de
los derechos parroquiales con ocasión de la muerte
de una monja en Chieri, cuestión con el párroco de
Santa María de la Scala a cuenta de las muchachas
mayores que frecuentaban el oratorio festivo,
asunto de la suspensión sin haber precedido
admonición canónica alguna, opúsculo El Arzobispo
de Turín, don Bosco y don Oddenino, <>. Pero el final es una odiosa acusación
contra el mismo don Bosco. <>.
Pero el canónigo párroco, lleno de animosidad,
había tomado el rábano por las hojas. La
conversación se remontaba al año 1878, cuando el
Arzobispo había concedido a don Bosco las
facultades necesarias para abrir el oratorio
festivo de Chieri. En aquel entonces, el Beato,
sabedor de que el canónigo párroco se dolía de
ello y presagiando
1 Véase M. B. Vol. XIV, pág. 455 y ss.
(**Es15.175**))
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