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>>Hace algunos años que los Padres Lazaritas
tomaron a su cargo esta misión, pero todo se
redujo a unos preparativos para organizar la casa
de los misioneros; luego, por falta de personal,
tuvieron que abandonarla.
>>A todas estas dificultades se añaden los
tristes efectos de la propaganda protestante, que
trabaja en estos pueblos>>.
Para cooperar a poner un dique a aquellos males
crecientes y dar cierta estabilidad a las misiones
patagónicas e impedir que aquellas poblaciones
cayeran víctimas de las insidias de los enemigos
de la fe, se aceptó la propuesta del celosísimo
Arzobispo Aneyros, que hacía también la propuesta
en nombre del Gobierno argentino de enviar a los
Salesianos a Patagonia. Se preparó, por tanto, una
expedición de doce salesianos el 15 de diciembre
último y, con mar más tranquila, llegaron a Carmen
el 2 de enero de este año. Otros salieron después
en auxilio de sus Hermanos; y si la divina
Providencia favorece las Misiones y sigue
apoyándolas, esperamos realizar otra expedición
muy pronto 1.
El Gobierno argentino, que, para ayudar a la
organización civil y religiosa de aquellas
colonias las constituyó en Provincia, favorece las
misiones y ((**It14.629**)) ofrece
al presente su actuación para ayudar a los
Salesianos a evangelizar las dos orillas del Río
Negro, que es como decir la promulgación del
Evangelio entre los salvajes Pampas y Patagones.
Para este fin promete ayuda material y apoyo
moral. Ultimamente, además el Presidente de
aquella República pidió formalmente que se le
presente un convenio donde se expongan las
condiciones que se consideren oportunas para
regular las relaciones entre los Misioneros, el
Gobierno y los Indios.
Los Salesianos llegados a Patagonia, por bondad
del Arzobispo de Buenos Aires, escogieron la
población de Carmen como centro de correspondencia
y de dirección. Sus primeras preocupaciones fueron
las de construir iglesias, viviendas, escuelas
para niños y niñas. Así, unos se dedican a enseñar
artes y oficios y agricultura en las colonias ya
constituidas y otros siguen avanzando por tierras
salvajes para catequizar y, si es posible, fundar
nuevas colonias en las regiones interiores del
desierto.
Las Hijas de María Auxiliadora han empezado ya
a trabajar en favor de las colonias, organizando
escuelas y asilos para niñas abandonadas.
1 La expedición estaba pensada para diciembre
de 1879; pero se retrasó, como ya hemos dicho. Don
Bosco supone que salieron entonces y que, según
sus cálculos, habían llegado el 2 de enero;
supone, además, que fueron enviados allá en
seguida todos los Salesianos y todas las Hermanas
designadas. Valga la misma observación para esta
carta a la condes Bosco-Riccardi de Turín.
Benemérita Señora Condesa:
íEsto es muy grande!: debería yo agradecer y
recibo las gracias. Realmente es una bondad
excepcional. De todos modos, sea todo a mayor
gloria de Dios. Mil gracias por la ofrenda que
hace para nuestros misioneros. Formando un grupo
de doce, salieron de Buenos Aires para Patagonia
el día 15 del pasado diciembre y ciertamente
rezarán por usted y su siempre querido y amado
caballero Aleramo.
Que les bendiga Dios y los conserve en buena
salud y en su santa gracia todo el año; y muchos
más todavía: al menos, ciento.
Espero poder hacerles una visita con don Juan
Cagliero. Rece por este pobrecito, siempre suyo en
J. C.
Turín, 3 de 1880.
Su atto. y s. s.
JUAN BOSCO, Pbro.
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