((**Es14.143**)((**It14.159**))
>>Demora de dos años? íNi pensarlo! Cuando el
Ministro conoció la deliberación de proponerle que
fuera diferida hasta el término del curso escolar
la intimación del decreto de cierre, no sólo no
accedió, sino que perentoriamente mandó al
Delegado ejecutar el cierre no más tarde del 30 de
junio. El señor Rho le avisó amistosamente,
añadiendo 1:
<>.
Después del relámpago, el trueno. Era la
víspera de la Natividad de San Juan Bautista,
fiesta en la que se celebraba el día onomástico de
don Bosco, cuando compareció un delegado de
policía en el Oratorio, a las diez de la mañana,
con el decreto, que entregó en manos de don Bosco,
pidiendo recibo de la entrega 2. Con fecha del
mismo día, le llevaba el correo, a la mañana
siguiente, una cartita de recomendación para
colocar al muchacho Miguel Gabbero; se la enviaba
el señor Angel Boggiani, miembro del Consejo de
Estado, una sección del cual había dado su voto a
favor del decreto de cierre.
((**It14.160**)) >>Cómo
era posible que don Bosco pudiese escuchar el
consejo de <> un decreto,
que le obligaba a tan precipitado cierre de sus
escuelas: El Oratorio no era un colegio de poco
más o menos, que vivía de la trampa y del
contrabando en un rincón escondido de la
península, sino que, por el contrario, el nombre
del que lo regía corría de boca en boca, honrado y
venerado por medio mundo en Italia y en el
extranjero; no era posible, de la noche a la
mañana, echar a la calle a tantos muchachos.
Creyó, pues, útil hacer lo que antes había
rehusado hacer, esto es, escribir inmediatamente
1 Carta del 20 de junio de 1879.
2 Véase: Apéndice, doc. núm. 22.
(**Es14.143**))
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