((**Es13.370**)
->>Qué hay? >>Qué te pasa? íOggero! íOggero!
Pero se dio cuenta de que ya no vivía. Nada hay
que temer de este sacerdote que estuvo en el
Oratorio, pues era una santa persona; pero ya veis
cómo se muere. Un sacerdote que había estado el
año pasado algún tiempo en el Oratorio, y después
en Lanzo, moría en San Nicolás, en brazos de don
Juan Cagliero, en una iglesia que él administraba.
Hablo de estos dos, pero podría hablar de tantos y
tantísimos más que murieron de improviso y de mil
maneras. Debemos, pues, procurar encontrarnos
siempre sin pecado, en la presencia de Dios, que
puede castigarnos en un momento y aniquilarnos.
Al decir que nos pongamos en guardia para no
ofender a Dios, entiendo también decir que si
alguno tuviese un pecado en la conciencia, procure
ponerse en gracia de Dios enseguida. Vosotros
sabéis cómo se hace esto, porque el Señor, que ve
cada uno de los actos que hacemos, no nos ve
solamente para castigarnos. El es justo y, por
esto castiga el mal y premia el bien. Es también
misericordioso. No es inflexible, no, es todo
bondad, ((**It13.429**)) es
amor; y esto hace que sea más propenso a
premiarnos que a castigarnos, y, cuanto más debe
temerlo quien tiene pecado en la conciencia, tanto
más debe estar alegre y contento quien está en
gracia de Dios. Pregúntese cada uno a sí mismo:
->>Puedo decir ahora que no tengo en el alma
nada que desagrade a Dios?
Si puede decirlo, quédese tranquilo, viva
feliz, corra, salte, coma, ría y duerma, que
siempre estará bien, pues no tiene miedo del
juicio de Dios; pero, si no lo puede decir,
procure ponerse pronto en gracia de Dios para no
temer la muerte, en cualquier momento que ella
venga. Buenas noches.
El día primero de agosto habían comenzado los
exámenes de fin de bachillerato. Los candidatos
del Oratorio habían quedado muy bien; es más, dos
de ellos habían merecido la calificación de
matrícula de honor. A juzgar por las <> del 24 de agosto se ve que todavía se
encontraban algunos presentes. Los exámenes de los
demás tenían que comenzar el lunes 27 y seguir
durante toda la semana. Don Bosco habría querido
que los aspirantes renunciasen a la ida a su casa.
Además de la noche del 24, habló también en la del
31. íQué de cosas bonitas dijo en estas dos
charlas!
24 de agosto. Pedir consejo acerca de la
vocación; en las vacaciones ocupar útilmente el
tiempo. Hoy tengo el gusto de daros las buenas
noches y dirigiros unas palabras. Hay algunos del
cuarto curso del bachillerato y diversos hijos de
María, que desean todavía venir a hablarme sobre
la vocación, y que me escribieron con respecto a
esto y a otras cosas. Debo contestarles, por no
haberlo hecho todavía. Había establecido el tiempo
apto para hablar con vosotros, pero éste me ha
faltado siempre. Así, pues, los que deseasen
hablarme, vengan a mi cuarto el domingo, después
de la bendición y todo se podrá arreglar. Tocante
a los del cuarto curso de bachillerato, quiero
creer que estén suficientemente instruidos, doctos
y animosos como para dar un buen salto; saltar a
pies juntillas el quinto curso del bachillerato,
esto es, pasar de un golpe del cuarto curso a
filosofía. Esto puede hacerse con preferencia
entre nosotros, porque durante los dos años de
filosofía tenemos todavía clase de literatura
latina y de literatura italiana.
(**Es13.370**))
<Anterior: 13. 369><Siguiente: 13. 371>