((**Es12.30**)
Sobre todo no dejéis nunca las prácticas de
piedad propias de la Congregación, pues son el
fundamento del edificio de vuestra santidad.
En la misa pediré por vosotros, para que podáis
guardar la virtud de la castidad, y consagrarla un
día a María con voto.
Pedid en la santa comunión esta gracia para
vosotros, para los compañeros, para los
superiores, para mí, no sea que la vaya predicando
a los demás en vano, si por desgracia no la
tuviera.
En conclusión, pidámosla unos para otros de
corazón y el buen Dios nos la concederá.
((**It12.24**)) Dos
días después de esta conferencia el Beato hizo
llegar una palabra paternal a todos los socios de
cada casa, haciendo votos para que su carta fuera
considerada <>.
Antes de darla a conocer echemos una ojeada al
Catálogo de 1876.
Encontramos registrados en él ciento doce profesos
perpetuos, setenta y nueve profesos trienales,
ochenta y cuatro novicios y cincuenta y cinco
aspirantes; sesenta y seis de los profesos son
sacerdotes. Aparecen en él cuatro casas nuevas,
que son: Niza (Francia), Bordighera-Vallecrosia,
San Nicolás de los Arroyos y Buenos Aires. No
acabará el año sin ver aumentado este número.
Diríase que las contrariedades, lejos de cortar
las alas de su celo, se las robustecían para más
amplios vuelos. En efecto, en 1880 haría a este
propósito una confesión muy elocuente. Desde Roma
el Cardenal Secretario de Estado le había
comunicado <> del Ordinario de
Turín. El Beato, al informar de ello por
exigencias del oficio a su Procurador en Roma, le
escribió: <> 1. Así entonces,
en medio de disgustos de esta misma clase, creaba
en el Oratorio la escuela de fuego, preludio de la
sección de los Hijos de María en el Hospicio de
Sampierdarena, y vivero fecundo de vocaciones
eclesiásticas y religiosas 2.
También esto sirve para demostrar cuán clara
era a sus ojos la visión de su propia misión,
misión que se afirmaba cada año más sin que jamás
los contrastres consiguiesen detener su
desarrollo. De ahí que los amigos experimentaron
una gran satisfacción al leer por primera vez en
el Anuario La Jerarquía Católica y la Familia
Pontificia <> del Beato
<> 3; lo cual,
1 Carta a don Francisco Dalmazzo, Turín, 21 de
julio de 1880.
2 Véase vol. XI, cap. III.
3 Carta de monseñot Fratejacci a don Bosco, 16
de enero de 1876. No sabemos por qué capricho del
compilador, llamó Curas Salesianos, a los
Sacerdotes Salesianos, contrariamente a lo que se
le había escrito.(**Es12.30**))
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