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a efecto esa Obra de María Auxiliadora (que ni
siquiera titula de Santísima), y que ponga remedio
a las desavenencias urdidas, que causan estupor
entre ciertos eclesiásticos más prudentes y
también entre personajes que llegan a
conocerlas>>.
Entre tanto, la inminencia del nuevo curso
exigía que se imprimiera sin dilación el programa,
para difundirlo con tiempo; por eso el Beato
mandaba y volvía a mandar al ((**It11.43**)) jefe de
imprenta a la Curia para retirar el suspirado
permiso. La insistencia no sólo no conseguía nada,
sino que atraía fuertemente la atención sobre don
Bosco, motivada por cierta ansiedad de conocer si
él había <>.
El Siervo de Dios respondió a vuelta de correo:
Carísimo teólogo Chiuso:
Te ruego comuniques a S. E. Rvma. el señor
Arzobispo que no he recibido ninguna orden o
exhortación de la Santa Sede, ni de ninguno de sus
órganos, para ponerme de acuerdo con el Arzobispo
de Turín respecto a la Obra de María Auxiliadora.
Si se me hubiere manifestado un solo deseo a este
respecto, lo habría ejecutado fielmente, como he
procurado hacer siempre. La razón es simplemente
ésta. Como la Obra de que se trata va dirigida al
bien general de la Iglesia, parece que no puedo
ligarme con un Ordinario, al cual podría referirse
alguna vez por algún alumno, o tal vez por
ninguno.
Si lo crees conveniente, puedes decir a S. E.
que, para no crear molestias a quien vivamente
deseo librarle de ellas, he deliberado hacer el
experimento del conocido proyecto en otra
diócesis.
Con la mayor estima, tengo el honor de
profesarme
Turín, 8 de agosto de 1875.
Afmo. en Jesucristo
JUAN BOSCO, Pbro.
El mismo día expidió una carta a un lugar mucho
más alto.
De las misteriosas palabras que acabamos de
referir, >>cómo no intuir lo que sucedía entre
bastidores y que, en parte, nosotros ya conocemos?
Escribió, pues, al cardenal Antonelli,
Secretario de Estado:
Eminencia Reverendísima:
De buena gana hubiera dejado de hablar con V.
E. Rvma., sobre un asunto que ciertamente aumenta
sus ya demasiado grandes ocupaciones; pero,
habiéndome asegurado
1 Carta del teólogo Chiuso, secretario, del 5
de agosto de 1875.(**Es11.44**))
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