((**Es10.421**)
de Gobiernos Civiles y Delegaciones provinciales;
pues el pueblo está viendo con pesar el completo
despojo de los edificios eclesiásticos al quedar
vacante una sede.
Esta disposición sería conveniente también hoy
en día, en que, por efecto de las vigentes leyes
financieras, los beneficiados tienen que pagar a
continuación los impuestos de manos muertas, y los
del traspaso de sucesión, que antes no existían.
No sabemos si el ministro Lanza respondió o
mandó responder. Parece que no. Pero consta que
don Bosco, tres meses después, volvía a
escribirle, proponiendo, para obtener la concesión
del Exequátur Regio a los Obispos, el envío
directo, por parte de la Santa Sede, de una nota
auténtica de cada uno de los preconizados en cada
Consistorio para cada diócesis, especificando el
nombre y apellido de cada uno y la sede que se le
asignó.
Excelencia:
El asunto de las temporalidades de los Obispos
últimamente preconizados debe arreglarse de algún
modo. Son ya demasiadas las hablillas que corren
entre el vulgo contra la Iglesia y el Gobierno, y
sin ventaja de nadie.
Hace algún tiempo escribí a V. E. que no me
parecía tan difícil llegar a una conciliación,
dejando intactos los principios, que el Gobierno
por un lado y la Santa Sede por otro, quieren
conservar.
Aunque ajeno del todo a la política y a los
asuntos públicos, y sin encargo de ninguna clase
para este fin, creo, sin embargo, que el Gobierno
puede quedar satisfecho con una nota auténtica de
la Santa Sede, en la que se declare al mismo
Gobierno que en el Consistorio celebrado con fécha
X (equis) fueron preconizados obispos para las
sedes vacantes Fulano y Zutano...
((**It10.458**)) Si V.
E. considera posible este proyecto, u otro que le
pareciere más fácil, y quisiera servirse de mí
para comunicárselo a quien corresponda, me tendría
por dichoso de haber prestado algún servicio a mi
Gobierno y reportado alguna utilidad a la Iglesia.
Como persona privada, desconocida en el mundo
político, no daría ocasión a los periódicos para
hablar a favor o en contra, como ya se pudo
observar en casos parecidos.
En todo caso suplico a V. E. tenga a bien
perdonar le haya molestado de nuevo; créame, con
sincero aprecio y profunda gratitud,
De V. E.
20 de mayo de 1872.
Su seguro servidor
JUAN BOSCO, Pbro.
En el intervalo mantenía relación con el Papa,
y le enviaba noticias de los alegres recibimientos
dispensados a los nuevos Pastores, de su
recuperada salud y, a lo que parece, también de
las gestiones
(**Es10.421**))
<Anterior: 10. 420><Siguiente: 10. 422>