((**Es10.265**)
humildes saludos. Hemos de agradecer a nuestro
buen Enría la atención que nos prestó.
>>Nuestro corazón se inflamó de nueva alegría
al oír cómo ((**It10.286**)) Dios,
movido por las incansables oraciones de muchos
fieles, unidos en un solo corazón, y por las
valiosas súplicas de su vicario en la tierra, se
ha complacido en devolver a nuestro amor un padre
tan querido.
>>Es conmovedor ver a nuestros aprendices cómo
dejan las diversiones y los juegos para correr a
los pies del altar e implorar con fervientes
súplicas la gracia de volver a ver pronto, sano y
salvo, a nuestro amadísimo padre.
>>Querido Enría, le rogamos tenga a bien
ofrecer nuestros agradecidos corazones al querido
Padre, pues no deseamos más que disfrutar de su
agradable presencia y oír sus consoladoras
palabras>>.
Don Juan Cagliero volvió a Turín el día 12, y
le llevaba a Buzzetti estos renglones, escritos
por Enría a las dos de la madrugada:
<>.
Y aquella misma noche volvía Enría a
escribirle: <>.
Pero, al día siguiente, don Juan Francesia
enviaba a don Miguel Rúa buenas noticias: <((**It10.287**)) el
pozal con el que lo subía. Giacomelli dejó caer la
cuerda una y otra vez, pero Savio no aparecía y
subió el pozal vacío. Se puso entonces a llamarlo
a gritos. Y don Bosco, que
(**Es10.265**))
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