Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es10.1100**) ella, de un lado a otro de la habitación; pero no sufrí nunca daño alguno. Ahora ya no tengo miedo, cualquiera que sea la amenaza de temporales, borrascas o truenos. Creo poder asegurarle, en nombre de Dios, que jamás le sucederá nada llevando las medalla al pecho y teniendo confianza en María. Me habla en su carta de la probabilidad de ir a Cerano, en tierras de Novara, después de la mitad de este mes. Si ello se realizase y V. E. me lo permitiera, iría a verle y a pasar un día en su compañía. No dejaré de tener cada día un memento especial en la santa misa. Pido a Dios le conserve junto a toda su familia con salud y gracia, y encomiendo también mi pobre alma a la caridad de sus santas oraciones, mientras me profeso, De V. Excelencia Agradecido y seguro servidor JUAN BOSCO, Pbro. Había encontrado ya la cantidad necesaria para la compra de la casa Coriasco, pero las gestiones para lograr que fuera declarada de utilidad pública la construcción de la iglesia de San Juan Evangelista, le obligaron a destinar aquel dinero a la adquisición de la longuera de terreno de Morglia. Seguía, pues, en busca de otras almas generosas, y escribía al conde Francisco Viancino de Viancino: ((**It10.1199**)) Lanzo, 20-9-(1873) Muy querido señor Conde: Ahora que la cuestión entre Prusia y Francia ha terminado, tengo que salir yo al campo, después de una batalla más reñida que la de Sedán. El señor Coriasco, dueño de la casita situada entre el Oratorio y la iglesia de María Auxiliadora, por fin está dispuesto a firmar la escritura de venta. Una persona caritativa acudió en mi ayuda y pude preparar las quince mil liras que pide y las deposité en el Banco de Descuento. Pero, entretanto, para acabar las gestiones con el protestante Morglia y obligarle a ceder, por utilidad pública, una longuera de tierra para la iglesia de San Luis, hubo que enviar una declaración al Consejo de Estado de que estábamos en condiciones de pagar aquella porción de tierra y apoyar la declaración con las quince mil liras depositadas en dicho banco. Esto hace que, hic et nunc (ahora mismo), no podamos utilizarlas. En este momento vino a mis mientes lo que usted me dijo una vez acerca del dinero depositado en el Banco de Descuento para hacer una ofrenda a la suspirada iglesia de San Luis o de San Juan. Así, pues, usted suministraría la cantidad de cinco mil liras para ir juntando de este modo lo necesario para casa Coriasco. Al quedar a libre disposición el dinero susodicho, yo emplearé esa cantidad para la misma iglesia. Si usted piensa aceptar esta proposición ganará méritos ante la Virgen y ante su hijo adoptivo san Juan, que son dos buenos pagadores. Yo estoy en Lanzo con los ejercicios espirituales y el sábado estaré en Turín. No (**Es10.1100**))
<Anterior: 10.1099><Siguiente: 10.1101>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com