Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es1.57**) tiempo para el desempeño de algún trabajo. Juan, apenas cumplidos los cuatro años, ya se ocupaba con mucha constancia en deshilachar las varas de cáñamo, que la madre le daba en determinada cantidad. Y el niño, acabada su tarea, se dedicaba a preparar sus juegos. Ya en aquella edad era capaz de redondear trozos de madera y hacer bolas y palos para el juego de la <>. Este juego consiste en que uno tira la bola con una estaca y el otro la devuelve de rebote con un palo1. Juan se sentía feliz jugando con sus compañeros; pero no faltaban disputas y riñas, fáciles en semejantes reuniones de chiquillos; en tales casos su papel era siempre el de pacificador, interviniendo para calmar los ánimos. Más de una vez la bola, manejada por aquellos inexpertos e imprudentes, iba a herirle en la cabeza o en la cara y, al sentir el dolor, corría en busca de su madre para que lo curara.La buena Margarita, ((**It1.49**)) al verlo en aquel estado, le decía: -Es posible? Todos los días me haces alguna trastada. Para qué vas con esos compañeros? No ves que son malos? -Por eso voy con ellos; cuando estoy yo, no se alborotan, son mejores, no dicen ciertas palabras. -Pero, mientras tanto, vienes a casa descalabrado. -Ha sido mala suerte. -Sí, es verdad; pero no vayas más con ellos. -Madre... -Me has entendido? -Si es para darle gusto, no volveré; pero, si estoy yo con ellos, hacen lo que yo quiero y no se pelean. -Está bien, ya veo que volverás más veces a curarte; pero ten cuidado -concluía apretando los dientes y moviendo ligeramente la cabeza-;mira que son malos, son malos. Y Juanito, sin moverse, aguardaba la última palabra de su madre, quien, después de pensarlo un momento, como si temiera impedir algo bueno, decía: -Bueno, vete con ellos. íResultan sorprendentes estos razonamientos en unos labios todavía es! Ya entonces se imaginaba estar en medio de numerosos niños, que vivían con él, sobre los cuales podía tener ascendiente, que estaban pendientes de sus labios mientras él hablaba 1 La galla debía ser un juego, especie de béisbol primitivo semejante al juego de la <> o <>. La <> es un juego de muchachos, que consiste en dar con un palo en otro pequeño y puntiagudo por ambos extremos, colocado en el suelo; el golpe lo hace saltar, y en el aire se le da un segundo golpe que lo despide a mayor distancia. (N. del T.)(**Es1.57**))
<Anterior: 1. 56><Siguiente: 1. 58>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com