Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


((**Es1.240**) del clero joven supo infundir en su corazón tal respeto, amor y obediencia al Romano Pontífice y exponer con tal claridad sus sagrados derechos en las relaciones con los Estados, que formó una nueva generación de levitas, despreciadores de los sofismas galicanos e invictos mantenedores de la supremacía y la infalibilidad del Papa. Todas las diócesis del Piamonte experimentaron las ventajas de aquella enseñanza de verdad, justicia y caridad. Fue tanbién don Cafasso quien perfeccionó la instrucción eclesiástica de nuestro Juan, haciendo de él un esforzado defensor de la Iglesia, dándole normas seguras para conocer en detalle la extensión de los derechos divinos y humanos de la misma, siendo como es el reino de Dios sobre la tierra. Juan Bosco, en efecto, al encontrarse con eclesiásticos de la antigua escuela, nunca dejará, con su humilde dulzura, de defender al Papa y a la Iglesia, y resultará hermoso ver que al final de la disputa y después de una pausa brevísima, concluirá sonriendo: íMáximas de la universidad! (**Es1.240**))
<Anterior: 1. 239><Siguiente: 1. 241>

Regresar a Página Principal de Memorias Biográficas


 

 

Copyright © 2005 dbosco.net                Web Master: Rafael Sánchez, Sitio Alojado en altaenweb.com